Menú

miércoles, 5 de diciembre de 2012

La palabra "Romántico"

La palabra "romántico" está realmente infravalorada, utilizándose para cualquier concepto que defina "algo bonito", o cualquier persona que diga "cosas bonitas". Por ejemplo:

Éste es Pepe en un bar, con su bigote recortado, su cabello negro echado hacia atrás con gomina, su sonrisa amarilla debido al tabaco, y su panza cervecera. Entonces llega Juan, ese típico jovenzuelo tímido, guapete sin destacar, que se sienta siempre al fondo en una esquina para no molestar, se pide su zumito y comienza a escribir en su cuaderno.

Y llegan Marta y Josefina, amigas de toda la vida de Pepe, y se sientan a su lado habiéndose saludado con dos besos y riéndole los chistes malos de siempre. A Pepe se le desvía la mirada al escote de Josefina, y piensa:

"Josefina, a ti te pondría fina filipina"

Entonces ésta sonríe, Pepe se infla pensando en que ella le ha leído los pensamientos y que está coladita por él, pero resulta que tiene que ir al baño. Cosas de mujeres, ya sabéis. Y se quedan Pepe y Marta a solas.

En ese momento en que Josefina no está Pepe aprovecha para hacer alarde de su prosa, o inspiración, o musa, o buena memoria, o como queráis llamarlo, y le suelta a Marta:

- Eres tan hermosa que hoy la luna no saldrá, avergonzada por la belleza que la eclipsa: la tuya.

Marta se sonroja, sonríe, y queda derretida ante la gallardía que ahora despide Pepe tras pronunciar esas palabras.

Josefina sale del baño, llamando por un momento la atención de Juan, quien la contempla como quien contemplase a un ser sobrenatural, y agacha la mirada, tímido, cuando ésta chocó con la de Josefina.

Al pasar la excelsa mujer, Juan anota algo en su cuaderno, abstraído y aislado del resto del mundo, el cual se presenta en ruidos y olores lejanos.

Josefina llega donde su amiga Marta, le dice un par de frases mientras Pepe le mira el culo de reojo, y se marchan; no sin antes haberle pedido Marta a Pepe una cita esa misma noche.

Nuestro amigo bigotudo las contempla marcharse esbozando una sonrisa de oreja a oreja pensando:

"Si no es con una, es con otra, pero hoy follo"

Mientras que Juan las contempla marcharse, nostálgico, repasando lo que ha escrito en su cuaderno:

- Una mirada nos unió un segundo. Un segundo en el que sentí que podía ser libre del mal que mi propio corazón se empeña en causarme. Sentí que mi alma podía tocar la tuya, que podíamos unirnos, que podíamos vivir juntos, crecer juntos, amar juntos. Todo eso me lo dijo tu mirada en un segundo. Y yo, pobre de mí, tímido, la aparté. Quizá intimidado por tu majestuosa belleza, quizá temeroso de lo que pudieras pensar sobre mí, no lo sé, tan sólo sé que ya estás lejos de mí, yéndote hacia un futuro incierto, el cual se me presentó eterno si estuviera a tu lado, en solamente un segundo.

Y así, el cabrón que memorizó una frase sacada de alguna película, poema, internet, o que se le hubiera ocurrido en el acto en un momento de divina inspiración sin ni tan siquiera sentirlo triunfará más que el introvertido de Juan, quien suspiró, aunque fuese durante unos segundos, por una bella mujer.

Y de esta manera podemos ver que no todos los que dicen cosas bonitas son unos románticos. Pueden serlo las dos primeras semanas, pero luego sacarán su verdadera cara, su verdadero ser, su verdadera faceta, y esa chispa que mantenían al principio acabará pronto. Por eso podemos oír tanto: "si es que al principio era un galán, un príncipe. Me atendía constantemente, se preocupaba por mí, me trataba como a una reina. Pero ahora se pasa el día tirado en el sofá viendo el fútbol".

Y es que la diferencia en este ejemplo es que el cabronazo de turno al que se le ocurre una frasecita la usa sólo para ligar, y el romántico para amar. Uno habla desde la lujuria, el otro desde el alma. Y uno se lo dice a todas, a ver si cuela, y desea a todas, mientras que el otro sólo ve a una y puede dedicarse a una.


Aunque un romántico no tiene por qué ser un chico introvertido, sino aquél que está cansado del mundo en el que vive y sueña con uno mejor. Vive en sus sueños, ama con profundidad, se decepciona y se entristece de forma tan rápida como con la que se ilusiona. Eso es un romántico.


romántico, ca.
(Del fr. romantique).

4. adj. Sentimental, generoso y soñador.

http://lema.rae.es/drae/?val=rom%C3%A1ntico


Siente con el alma, le gusta hacer feliz a los demás, y sueña en un mundo de ilusiones, por eso se deprime con rapidez, porque ve el mundo devastado en el que estamos, y su corazón llora...

Un romántico también puede cansarse de su pareja si ésta tampoco coopera a la hora de amar, pero lo que está claro es que la amará incondicionalmente y con mayor profundidad que un cabrón.

Simplemente hay que fijarse. Una persona normal se fijará primero en el culo, un romántico en una mirada. Hombre, si está de espaldas eso le va a costar, y tampoco es de acero el tío, pero amará con esto:

<3

Y no con esto:

(_)_)==========D


Espero haber sido claro, y que algún día la palabra romántico no se emplee tan a la ligera. Estoy harto de ser creativo siempre y de inventarme piropos nuevos con las mujeres que me gustan para que luego a un tío sin originalidad y escaso de inteligencia lo llamen romántico.

La diferencia entre que un hombre común y un romántico te regalen una rosa es que el romántico se esforzará día a día para regarla y cultivarla, evitando que no marchite nunca, a pesar de la corta vida de la flor...


No hay comentarios:

Publicar un comentario